Negociaciones secretas entre Trump y Maduro: ¿un pacto pragmático a la vista?

Según una exclusiva revelada por el Washington Post, miembros cercanos al gobierno electo de Donald Trump han mantenido conversaciones privadas con representantes del régimen de Nicolás Maduro en Venezuela. 

De acuerdo a fuentes anónimas citadas por el diario, las negociaciones se han enfocado en explorar un posible "camino a seguir" entre ambas administraciones, incluyendo temas como la deportación de venezolanos indocumentados y el acceso de Venezuela a la venta de petróleo a Estados Unidos.

Maduro habría expresado su disposición a recibir a los deportados venezolanos, pero a cambio habría solicitado herramientas para reactivar la maltrecha economía de su país, incluyendo un mayor acceso a la venta de crudo a Estados Unidos. Esto supondría un giro inesperado, ya que el gobierno de Trump impuso duras sanciones petroleras a Venezuela en 2017.

Según el reporte, los ejecutivos de la industria petrolera estadounidense estarían presionando a Trump para evitar un nuevo embargo, argumentando que les conviene mantener las operaciones de empresas como Chevron en Venezuela y el flujo de crudo venezolano a Estados Unidos.

Esta información plantea un escenario complejo para la política exterior de Trump hacia Venezuela en sus últimas semanas en el cargo. Por un lado, el mandatario electo ha sido presionado por figuras como el senador Marco Rubio para mantener una postura confrontacional contra Maduro. Pero por otro, Trump parece inclinado a una aproximación más pragmática que evite un alza en los precios de la gasolina en Estados Unidos.

Analistas consideran que Trump podría optar por un delicado equilibrio: mantener la presión diplomática y comercial sobre Venezuela, pero evitar un enfrentamiento directo que perjudique intereses económicos estadounidenses. Todo ello mientras el gobierno saliente de Biden reconoce formalmente a Guaidó como presidente legítimo.

Sin duda, las revelaciones del Washington Post abren un nuevo capítulo en la compleja relación entre Washington y Caracas, donde los intereses geopolíticos, económicos y principios democráticos se entrecruzan de manera intrincada. El desenlace de estas negociaciones secretas será clave para definir la política de Estados Unidos hacia Venezuela en los próximos años.