Irán: La Guardia Revolucionaria Descarta Negociaciones con Estados Unidos sobre Misiles

 

 

Teherán, Irán - La Armada de la Guardia Revolucionaria de Irán ha rechazado cualquier negociación con Estados Unidos sobre sus misiles y las capacidades de la alianza antiisraelí "Eje de la Resistencia", según informaron los medios iraníes este sábado.

 

El contralmirante Alireza Tangsiri, comandante de la Armada de la Guardia Revolucionaria, afirmó que "Irán nunca negociará sobre sus misiles ni sobre las capacidades del Frente de la Resistencia".

 

La declaración llega tras la presentación de una nueva base subterránea de misiles balísticos el martes pasado, la cuarta desde principios de año, y en respuesta a una carta enviada por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, al líder supremo de Irán, Ali Khamenei, instando a conversaciones sobre el programa nuclear iraní, sus misiles y su apoyo a grupos como Hezbolá de Líbano, Hamas de Palestina y los hutíes de Yemen.

 

Tangsiri aseguró que no conoce el contenido de la carta de Trump y que "no le importan los análisis y las evaluaciones hechas al respecto".

 

"Escucho sus amenazas y veo sus acciones, y me preparo para afrontarlas", sostuvo el alto cargo militar.

 

Tangsiri advirtió que "nadie puede golpear a Irán y huir, incluso si tenemos que perseguirlos hasta el Golfo de México, lo haremos", demostrando una postura firme ante las amenazas estadounidenses.

 

Trump ha amenazado con un ataque militar a Irán si rechaza las negociaciones, pero Tangsiri ha asegurado que cualquier ataque tendrá una "respuesta contundente".

 

"Podemos atacar bases enemigas dondequiera que estén", resaltó.

 

Mientras tanto, el ministro iraní de Relaciones Exteriores, Abás Araqchí, anunció que Irán ha respondido a la carta de Trump y está dispuesto a conversar de manera indirecta con Washington.

 

Araqchí reiteró que Teherán no está dispuesto a mantener negociaciones directas bajo la actual política de "máxima presión" de Trump y sus amenazas militares, pero sí a dialogar de manera indirecta con Estados Unidos.

 

La postura de la Guardia Revolucionaria y el gobierno iraní refleja una profunda desconfianza hacia las intenciones de Estados Unidos, agudizando las tensiones entre ambos países.

 

El futuro de las relaciones entre Estados Unidos e Irán parece depender de la voluntad de ambas partes de encontrar una vía de diálogo que permita superar las diferencias y evitar un conflicto mayor.