¿Reparto de Ucrania? Trump negocia con Putin el fin de la guerra con lenguaje empresarial

 

 

Washington D.C. - 17 de marzo de 2025 - El mundo observa con inquietud la próxima conversación telefónica entre el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y su homólogo ruso, Vladimir Putin. Este martes, ambos mandatarios discutirán el futuro de la guerra en Ucrania, con la esperanza de lograr un alto el fuego. Sin embargo, la retórica utilizada por Trump para describir la negociación genera preocupación, ya que parece priorizar la lógica empresarial por encima de las necesidades humanas.

 

Trump ha utilizado términos como "dividir ciertos activos" para describir la negociación, olvidando que se está hablando de territorio, personas y vidas. Su enfoque parece estar centrado en un reparto territorial de Ucrania, sin considerar el impacto devastador que esto podría tener en la población ucraniana.

 

"Hablaremos de dividir ciertos activos", dijo Trump a la prensa. "Es mucha tierra, muy diferente a lo que era antes de la guerra. Hablaremos de centrales eléctricas, ya estamos hablando de eso, de dividir ciertos activos".

 

Estas declaraciones hacen pensar que Trump estaría dispuesto a negociar la entrega de la central nuclear de Zaporiyia a Rusia, una instalación actualmente ocupada por las fuerzas rusas.

 

El enfoque pragmático de Trump contrasta con las líneas rojas establecidas por Rusia. Putin exige la recuperación de los territorios que Rusia reclama como propios, la ausencia de tropas occidentales en Ucrania y la desmilitarización del país.

 

La conversación entre Trump y Putin llega en un momento crucial. Ucrania se encuentra devastada por la guerra, con millones de personas desplazadas y un futuro incierto. Sin embargo, Trump parece estar más interesado en un acuerdo rápido que beneficie a Estados Unidos y Rusia, sin importar el costo para Ucrania.

 

El uso de lenguaje empresarial por parte de Trump genera preocupación por su falta de sensibilidad hacia la población ucraniana. Su enfoque pragmático podría llevar a un acuerdo que beneficie a las grandes potencias, pero que deje a Ucrania en una situación aún más vulnerable.

 

La conversación telefónica entre Trump y Putin promete ser un momento clave en la guerra de Ucrania, pero las decisiones que se tomen podrían tener consecuencias desastrosas para el pueblo ucraniano.